¿Cómo afecta el dinero a la manera en la que construimos productos digitales? En su charla en La Product Conf, José Ramón Pérez Agüera, CTO en Mercadona Tech, nos enseña a identificar y medir el valor real que aportan nuestras acciones, utilizando indicadores contables clave que influyen en los resultados financieros. Descubre cómo traducir el éxito de tu producto digital al lenguaje de los negocios a través de los estados financieros y flujos de caja, conectando directamente tus decisiones de producto con el impacto económico en tu empresa.
Principales aprendizajes:
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Si no conoces los números, estás decidiendo a ciegas. Tomar decisiones sin entender la estructura financiera del negocio es como ir a comprarte un Rolex sin saber si tienes saldo. Margen, beneficio operativo, flujo de caja, coste del equipo... son conceptos que deberían formar parte del día a día de cualquier persona que trabaja en producto. Si gestionas presupuesto, personas o tiempo, también gestionas inversión. Y si no sabes qué retorno está generando, difícilmente sabrás si vas por buen camino.
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No todas las empresas pueden permitirse fallar igual. Iterar rápido, lanzar MVPs y asumir fallos es muy sexy… si puedes pagarlo. Pero la realidad es que no todos los negocios tienen el mismo colchón financiero. En contextos con márgenes bajos o estructuras intensivas en capital, cada error puede costar muchísimo. Eso implica cambiar el enfoque: más validación previa, más foco en eficiencia y más decisiones estratégicas. Fallar también tiene un precio, y no siempre hay presupuesto para cubrirlo.
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Elige tu forma de hacer producto según los números, no según modas. ¿Bottom-up o top-down? ¿Working backwards o Lean Startup? La metodología no debería elegirse por fe ni por tendencia, sino por estructura de costes. Empresas con caja, margen y escalabilidad pueden permitirse exploración y autonomía. Pero cuando el modelo exige eficiencia y precisión, hay que priorizar productos que expandan márgenes, no solo que generen ingresos. El enfoque de producto tiene que estar alineado con cómo gana dinero tu empresa. Si no, el riesgo de estrellarse es alto.